Cada año, y ya son seis, invierten su cuaresma en recorrer distintos municipios y ciudades representando una obra en la que el mensaje de Cristo se lleva a lo cotidiano, a lo diario, a la vida. Ellos son tramoyistas, escenógrafos, guionistas, bailarines, actores, cantantes… Y es que para los casi 30 componentes del elenco, no hay nada más necesario que dar la vida por el mensaje del Nazareno.
El musical La Pasión abrirá el telón una vez más en Cieza. Sonarán canciones que narrarán la historia que, como una especie de misterio, calará, como ya lo ha hecho por 5 veces, en el corazón de los cientos de ciezanos que ya tienen su entrada.
¿Jesús sigue muriendo hoy?
Es una pregunta interesante porque ahí radica el objetivo del musical. Su sentido es ese: mostrar a la gente que Jesús sigue muriendo hoy y lo sigue haciendo en todas las circunstancias por las que pasamos las personas. No solo nos basamos en aquella historia de Jesús, que pasó y quedó, sino que creemos, como cristianos, que Jesús sigue muriendo hoy en cada persona, en cada momento. Y ahora, con lo que está pasando, esto tiene más significado todavía.
¿Cuál es el objetivo de este teatro? ¿Qué quieren lograr con esta representación?
Nos mueve un espíritu cristiano, el querer evangelizar y llevar el mensaje de Jesús a la sociedad. El musical cuenta una historia paralela a la Pasión de Jesús, una situación de dolor, la de una persona con una situación de enfermedad. Se muestran los sufrimientos de esa persona, su familia y sus amigos y, a la vez, los de Jesús. ¿El objetivo? Evangelizar. Hacer llegar a la gente nuestra historia.
La gente, cuando va a ver el musical, quizá espera ver una representación de La Pasión y no piensan que la representación lleva esta trama. Da la esperanza y la fuerza de decir “Jolín, yo creo en Jesús, creo que él murió, que resucitó y que la mala situación que vivimos ahora también se puede superar”.
Los miembros del elenco cuentan que, a lo largo de estos seis años, han compartido con el público muchas experiencias. Para ellos, es muy emocionante ver cómo su representación, hecha por aficionados, cala en el corazón de tantas personas.
Obviamente, lo que hacen, para ustedes, es algo más que un musical
Para nosotros no es un teatro. Lo que intentamos es transmitir lo que vivimos en el día a día como cristianos y, sobre todo, llevar nuestro mensaje de esperanza a los demás. No somos actores, no somos profesionales, no somos nada. Simplemente es transmitir lo que sentimos y lo que vivimos nosotros. Si no lo viviéramos, no lo podríamos transmitir. De hecho, eso es algo que siempre nos dicen al final, que les llega lo que transmitimos
¿Y creen que ese mensaje que intentan transmitir verdaderamente llega?
Llega, llega, por supuesto. Tenemos la experiencia real de la gente que nos da su testimonio al acabar cada teatro y luego tenemos otros que nos llegan a posteriori que nos dicen que, efectivamente, ese objetivo se ha cumplido: el mensaje llega.
El otro día, una chica de Cartagena nos decía que este año se le habían muerto tres personas, dos de ellas de cáncer, y que el musical le había ayudado quizá a pasar esa situación de una forma diferente.
Hay otra parte, que es la de la gente que no es cristiana y va a ver el musical. También ellos se sorprenden y ven que, lo que decimos, les llega también, aunque no tengan la misma visión que nosotros.
A colación con lo que dicen, ¿una persona atea puede ver y disfrutar del musical?
En Facebook comentaba un hombre el otro día que no era cristiano pero que, al ver el teatro, había visto una buena puesta en escena y que le había llegado, que había tenido sentimientos.
De todos modos, la persona que no es cristiana o que no cree mucho en Jesús y en todo esto, suele ir a vernos arrastrada por otra persona pero, podemos decir que se sorprende. No es que se transformen pero sí les llega aquello que hacemos y les da por pensar.
Un amigo, que no sabíamos que estaba enfermo, fue a ver la representación en San Juan Bosco y, sin ser cristiano, le ayudó un montón. Pasó toda la representación llorando. Por suerte, luego no tuvo la enfermedad.
Entiendo entonces que sí, que es para todos los públicos
Un ateo que vaya a ver el musical, al final tiene un beneficio. Estas personas no suelen creer en la iglesia, pero en realidad sí que creen en algo. Nosotros mandamos un mensaje, que es Jesús, que es el de una persona que pasó por la historia haciendo el bien. En el musical no se trata el tema de la iglesia, no se trata nada de eso, solo Jesús. Entonces casi cualquier persona sale con la fibra tocada.
Es, por tanto, una responsabilidad la que tienen
Nuestra responsabilidad y objetivo, como grupo, es evangelizar. Tampoco vamos pensando si llega o no llega, lo hacemos y que diga el Espíritu Santo. La responsabilidad es sentirnos obligados a hacer algo con el sentido de evangelizar, tratar de que la persona que va a vernos tenga un encuentro con Cristo a través de las escenas, las músicas, los sentimientos…
¿Cuál es la evolución que ha tenido, en estas 6 temporadas, el teatro?
Hay muchísimo cambio. Ahora te pones el primer DVD, que lo hicimos en la ermita, y ves que ha mejorado todo. En lo que más hemos evolucionado ha sido en el hecho de meternos nosotros mismos en el personaje. Antes algunos actuábamos como autómatas pero ahora nos creemos que podemos ser esa persona, vivir en esa época y sentir este o aquel sentimiento. Eso lo ha hecho el paso de los años. Nosotros mismos nos vamos auto-dirigiendo.
Respecto al musical en general, la evolución es grande. Esto empezó siendo un pequeño recital que se hizo en cuaresma con unas canciones y un vídeo. Después lo convertimos en un musical que ha ido creciendo en cuanto a todo: escenografía, atrezo, música…Y este año todavía más porque hemos metido tres canciones nuevas y hemos metido gente nueva. El musical no pierde el sentido de los años anteriores pero sí que le hemos dado un matiz más actual todavía.
¿Por qué circunscribir las representaciones al periodo de Cuaresma?
Porque es la época en la que pega realizarlo. Es un modo de prepararnos para la Pascua, para la Semana Santa. Antes no es tiempo, con el carnaval y eso. En Semana Santa, cada pueblo está celebrando sus procesiones y sus celebraciones religiosas y tampoco. Después, en Pascua, sí pegaría, el problema es que realizar el musical supone mucho para nosotros: el esfuerzo de los ensayos, el montaje de todo, dejar todos los compromisos familiares y personales los fines de semana…De modo que lo limitamos a las 5 representaciones de las semanas de Cuaresma.
Como cristianos activos en sus respectivas parroquias, ¿Cómo les afecta realizar el musical para vivir personalmente su Cuaresma?
Nos afecta en que estamos un poco más alejados de la parroquia, de lo que podríamos hacer en cuaresma pero, de otra parte, nos ayuda a vivir muy intensamente la Cuaresma. Para nosotros, ya lo hemos dicho, hacer el musical es hacer oración. Un modo de prepararnos para vivir la Semana Santa.
¿Es un buen momento para ser cristiano?
Siempre es buen momento para ser cristiano. El Señor tiene predestinado cuándo va a tocar le corazón de cada uno y debemos dejarnos hacer. Aunque a veces en la sociedad pueda estar mal visto ser cristiano o no entiendan por qué vamos a misa o porqué vamos a la iglesia, para un cristiano siempre es bueno serlo.
Luego, la Cuaresma es un momento más propicio para sentarte a pensar, plantearnos, reflexionar…Estamos en la sociedad, vemos los problemas y estamos ahí, como cualquier persona.
Respecto al futuro: ¿Cuál es la senda que atisban para la representación?
Cuando cerramos el telón nunca sabemos si será la última representación. Siempre nos sorprendemos porque, desde estos seis años, salvando el año pasado que no se realizó, siempre ha surgido el volver a hacerlo. Cuando cerramos en telón corren proyectos y cambios por nuestras cabezas, pero no se llevan a cabo hasta que no nos ponemos de nuevo en marcha.
De todos modos, con todo lo que viene detrás de críos y los jóvenes que han entrado nuevos, creemos que hay mucho camino. ¡A nosotros que nos pongan de ancianos del Sanedrín! (ríen)
Hablemos de Cieza. ¿Qué supone, para ustedes, realizarlo en el pueblo de donde son la mayoría y que vio nacer este proyecto?
Cieza para nosotros es una locura. Hay expectación, la gente desea vernos. Ocurre en todos sitios pero, al ser el sitio donde nació… Es una locura en todos los sentidos. Es una satisfacción ver que después de hacerlo aquí 5 años, la gente siga queriendo verlo otra vez más. Es una emoción muy grande. También lo vemos con mucha responsabilidad. Nadie es profeta en su tierra pero nosotros creemos que lo estamos consiguiendo.
Casi siempre procuramos cerrar en Cieza, es algo muy emotivo. Este año también fue muy emocionante el primero que hicimos, el Bullas, que lo dedicamos a la gente que ya no participa.
¿Cómo surgió la idea de grabar un disco? ¿Qué respuesta ha tenido en el público?
La respuesta fue buenísima. ¡La gente va con el disco rayado en el coche! (ríen). Fue una experiencia muy bonita. Después de tener las canciones e invertir en la música, ¿Por qué no hacer el CD? Fue un proyecto bueno, que nos unió más.
También fue una cosa ilusionante saber que lo vas a grabar, que va a quedar para siempre… Hicimos 1000, quedan aún unos pocos y todavía se siguen vendiendo.
También las nuevas generaciones contribuirán a prolongar la historia de esta representación
Tenemos cada vez más niños y jóvenes que se han incorporado. Si es por la savia nueva que está entrando, hay musical para rato. Los que han venido este año se lo están tomando con muchas ganas.
¿Merece la pena este proyecto?
Sí. Pero un sí bien grande. Merece la pena por todos los que lo ven pero, además, por nuestra satisfacción personal.
Están convencidos y así lo manifiestan. Cristo tiene un papel fundamental en el escenario de sus vidas y como un apuntador, les dicta los mensajes que, con empeño, tratan de llevar al público en cada representación. Para ellos, Jesús sigue muriendo hoy en cada corazón, en cada alma extraviada. Y quieren ser luz que ilumine los oscuros caminos.
Este sábado rompen filas en Cieza con su última representación antes de la Semana Santa. Será a las 19h. y a las 21.30h.