La intensa lluvia caída horas antes hizo temblar a los hermanos del primer Papa de la Cristiandad, pero hay estaba Él en su trono rococó orando ante el Cristo de la Expiración para poder volver a la Casa Museo de la Semana Santa y vivir, otro año más, la Pasión en Cieza.
Cuando el reloj marcaba quince minutos sobre las nueve de la noche, hora estipulada para dar comienzo el traslado, comenzaron a sonar los redobles de la Agrupación Musical ‘’Sones de Pasión’’ y el cortejo se ponía en la calle. El redoble calmó los fervientes deseos de ver como por segundo año consecutivo la Hermandad de San Pedro salía desde la Iglesia de Santa Clara.
Si el año pasado fue un poco el de la duda, por el cambio de sede canónica y de recorrido, de este podemos decir que fue el año de la confirmación, porque ni el frío ni la lluvia que había bañado la piedra pudieron con las ganas, la ilusión y el arrojo de la Hermandad de San Pedro. Este fue el año de la confirmación por que ya nada era extraño. Ni para la propia hermandad ni para el pueblo de Cieza, que como si de toda la vida se tratase no dudó en acudir a arropar a la hermandad y llenar las calles del recorrido. Especialmente la Calle Cadenas, calle procesional por antonomasia, o el Camino Madrid. Fue esta arteria principal de Cieza la que primero sintió el paso decidido y elegante de las túnicas azules de la cofradía ciezana. Con paso decidido y siempre marcando el paso y al compás del tambor de la Agrupación Musical ‘’Averroes’’ de la OJE, que volvía tras cuatro años de ausencia tras la obra de Palma Burgos, el cortejo de San Pedro fue poco a poco completando el recorrido procesional. En apenas dos horas y media se puso el cortejo en la Casa Museo de la Semana Santa de Cieza. Destacar del cortejo la presencia en el mismo del Pregonero de la Semana Santa de Cieza 2019; D. Antonio Morales Balsalobre, Nazareno del Año de la Semana Santa de Cieza 2019; D. Antonio Lucas Parra, así como del alcalde de Cieza; D. Pascual Lucas, y el Presidente de la Junta de Hermandades Pasionarias de Cieza; D. Joaquín Gómez.
Sobre las once y media de la noche hacia su entrada en la Casa Museo de la Semana Santa de Cieza la cofradía al completo. Tercio de nazarenos e imagen. Otro año más la Hermandad de San Pedro nos dejaba las puertas de una nueva Semana Santa casi abiertas. Otro año más volvieron a mostrar esa línea ascendente por la que llevan trabajando tantos años. El esfuerzo de todo un año comienza a cobrar sentido en estos días. San Pedro es el segundo aviso. Pronto la Basílica de la Asunción volverá a escuchar a un ciezano hablar de lo que más quiere; La Semana Santa de Cieza. Pronto D. Antonio Morales Balsalobre ocupará el ambón de la Basílica de la Asunción. Los redobles llenarán las calles de Cieza y los estandartes volverán a ser bañados por el sol de una nueva primavera, pero ya con San Pedro esperando la llegada de la semana por excelencia para los ciezanos, la Semana Santa Ciezana.