El portavoz municipal de CCCi, José Luis Vergara, entiende que la actual disposición de los maceteros ubicados en las aceras de las calles Tercia y Santo Cristo representa un problema de seguridad vial para los peatones que deben abandonar la franja de acera e invadir la zona de rodadura del tráfico motorizado para seguir caminando. “Los maceteros ya angostan demasiado el paso, de por sí estrecho, de estas aceras, pero además las ramas bajas suponen un problema añadido obligando a los viandantes a caminar de vez en cuando por la calzada reservada a los vehículos”, afirma Vergara Giménez, que pudo comprobar in situ la imposibilidad de seguir un trayecto recto para los peatones, pues de hacerlo “algunas ramas golpean directamente en el rostro de los caminantes. Si con esta medida se pretendía disuadir el aparcamiento ocasional de coches encima de la acera hemos de reconocer que el remedio es casi peor que la enfermedad y que se deben articular otras medidas para proteger a los vecinos de la zona, el acceso a sus casas, pero también el libre pasear de la gente”, añadió.

El concejal independiente ha reclamado en varias ocasiones, durante el último año “que se lleve a cabo el acuerdo unánime del pleno que promulgó la preferencia peatonal en todo el Casco Antiguo y limitar la velocidad de los vehículos a 20 Km/h de máximo. Vergara anunció que son múltiples los sustos que se suceden semanalmente en el barrio viejo. “Hace unos días una vecina resultó golpeada en el codo por un retrovisor y también en la calle Cadenas, no hace mucho, otra se llevó un golpe en el hombro con otro espejo de un furgón de reparto. No digo que esto acabe absolutamente con los incidentes pero desde luego los rebajaría mucho, tanto en frecuencia como en gravedad”.

Finalmente el concejal de Ciudadanos Centristas Ciezanos aboga por reestudiar la disposición “de cualquier mobiliario o dispositivo urbano que estreche en más de un tercio el ancho de cualquier acera de Cieza. Soy favorable a proteger los accesos a las viviendas del barrio pero esto no debe hacerse a costa de poner en peligro la seguridad del tráfico”, concluyendo con que “también debe estudiarse la condición especial de los vehículos empadronados en el Casco Antiguo, mediante alguna medida de bonificación en el sello del coche porque lo cierto es que pagan como los demás pero muy pocos vecinos pueden aparcar libremente en las calles, teniendo que comprar o alquilar plazas de garaje y ese sobrecoste, al que les obliga de hecho el PGMO y las disposiciones de vía pública, debe compensarse de alguna manera”.