La cultura y el arte no pasan por buenos momentos, pese a que dicen que en época de tribulaciones es cuando más se mueve el mercado de arte. El mercado de arte, ese que es inaccesible para una gran parte de la sociedad, está en continua renovación, Cieza bien lo sabe. Hace escasos diez meses nacía la Asociación ‘’Artistas de Cieza’’, un lugar de confluencia para artistas consagrados y noveles, y, entre ellos, nuestra entrevistada de hoy.
Mientras conduce el coche de la empresa que la contrata, y que lo más cercado que tiene al arte es el rótulo de su entrada y la pintura de las piezas, sueña con, algún día, ser reconocida por su manera de hablar de las personas a través del arte. Siente pasión por la mirada y hoy, Felisa Gómez, nuestra entrevistada, pinta a África, sin perder de vista las miradas, las de su familia y las de la vida.
¿Quién es Felisa Gómez?
Soy una artista que estudió la Licenciatura de Bellas Artes en la Universidad de Murcia, completando mi formación con el Máster Universitario en formación del profesorado de Educación Secundaria Obligatoria y bachillerato. Además, he realizado diferentes cursos de joyería y serigrafía, entre otros. Estos cursos me han ayudado a adquirir y profundizar en otras disciplinas y técnicas artísticas, queriendo experimentar el arte en toda su diversidad.
¿Se puede vivir del arte?
Actualmente, pienso que es muy difícil vivir solamente del arte, ya que no se valora el proceso ni el trabajo que realiza el artista con cada una de sus obras. En general, las personas desconocen el proceso de elaboración que va desde la idea principal hasta llegar a plasmarlo en el soporte. Es un proceso lento, ya que en este trayecto el artista experimenta, investiga, realiza bocetos y otra serie de fases hasta que finalmente se alcanza el resultado final de su obra. En este sentido, y tal como decía Monet: “Nadie es artista a menos que lleve su cuadro en la cabeza antes de pintarlo, y esté seguro de su método y composición.”
¿Es el arte cuestión de ricos? En referencia al precio que se paga por una obra de arte
Esta cuestión va a depender de diferentes factores, como por ejemplo: los materiales utilizados, el tiempo dedicado, el tamaño de la obra, etc. En general, pienso que el arte puede estar al alcance de todos/as. Aún así, soy consciente de que algunas obras, ya sea por quién la firma o por su trayectoria artística, solo puedan adquirirlas personas con un nivel adquisitivo alto.
¿Qué consejos le darías a un estudiante que esté cursando ahora mismo Bellas Artes?
Le diría que no perdiera nunca la ilusión por crear que, aunque se encuentre con muchos obstáculos en su carrera, nunca se dé por vencido/a; sé que es un camino difícil, pero a la vez muy bonito. En los momentos más duros siempre tengo presente una frase de Albert Espinosa y que me gustaría compartir: “Si crees en los sueños estos se crearán”.
El escritor Miguel Ángel Oeste señalaba hace poco en El Mundo: ‘’en España apenas se tiene en cuenta la cultura en ningún ámbito. No se le da ningún valor, empezando porque está mal remunerado, si uno hace cuentas entre las horas que dedica y lo que ingresa, alucina, cuando nunca se ha visto mejor que en este momento que la cultura es un refugio: la usamos todos, nos beneficia a todos, nos hace mejores personas, nos facilita la vida.’’ ¿Tan mal está la cultura?
Tengo que decir al respecto que en los últimos años, desde el ámbito educativo, ha habido reducciones en las horas lectivas de asignaturas como Plástica y Música, sobreentendiendo que se trata de materias sin importancia en la educación de los niños y niñas. Así mismo, bajo mi punto de vista, es importante resaltar la importancia de la enseñanza de las artes en todos los niveles educativos. Son materias que favorecen la creatividad, la expresión, la atención, el desarrollo motriz y espacio-temporal, regula el estrés, etc. En cualquier caso, la educación artística es beneficioso en todos los ámbitos del desarrollo del ser humano y a nivel educativo lo estamos limitando y, por consiguiente, no se valora. Por todo ello, creo que se debería de impulsar más la cultura ya que hoy en día ella vive, pero, en muchas ocasiones, de forma oculta. Tal y como podemos observar en esta situación inusual que estamos viviendo.
¿Hay actualmente una apuesta firme de las diferentes administraciones por la pintura?
Pienso que no todas las administraciones, tanto a nivel nacional, autonómico como local, apuestan firmemente por la pintura. Son solo unas pocas los que se movilizan para poner en marcha diferentes proyectos artísticos.
Cómo artista, ¿te sientes valorada?
No me siento plenamente valorada como artista, ya que no me dedico plenamente a ello, a pesar de que algunas de mis obras han sido seleccionadas en concursos a nivel regional. Sin embargo, personalmente, estoy satisfecha de lo que hago, porque soy una persona inquieta por estar en continuo aprendizaje. Me gusta absorber de cada situación, experiencia y técnica para no solo enriquecer mis obras, sino enriquecerme como persona. Mis obras son un reflejo de lo que siento.
¿Crees que los pintores más jóvenes tenéis las mismas oportunidades que aquellos que están consolidados?
Personalmente creo que no, porque son artistas con un largo recorrido y emplean técnicas ya consolidadas y definidas. Las personas, en general, apuestan por artistas ya conocidos, con “nombre” y con una trayectoria reconocida.
¿Son las galerías de arte un mundo inaccesible sino vas cogida de la mano por una persona, digamos, de referencia?
Así es, por lo que es muy difícil abrirse camino por ti misma. Es frustrante presentar tu trabajo y que no te lo acepten porque no vas de la mano de nadie o porque no se atreven con algo diferente. En este punto, me gustaría subrayar que esto no ocurre en todas las galerías, algunas apuestan por las obras de jóvenes artistas.
¿Algún proyecto que estés preparando?
Actualmente estoy trabajando en una exposición colectiva con otra artista, Sofía Campillo. Estamos trabajando sobre un mismo tema o hilo conductor, pero empleando diferentes técnicas. Se trata de un trabajo muy interesante y, sobre todo, bonito que esperamos muy pronto poder enseñarlo, y, por supuesto, que entusiasme al espectador tanto como lo está haciendo con nosotras.
¿A la pintura le queda mucha vida?
Si, al arte en general. Siempre va a ser un medio de expresión de emociones y sentimientos. Desde mi punto de vista creo que no podría concebir un mundo sin arte, sin otro punto de vista. Las obras artísticas nos hacen reflexionar, nos ayudan, nos remueven por dentro, hace aflorar sentimientos que día a día tenemos escondidos. Hoy, más que nunca, necesitamos expresarnos, necesitamos sentir, necesitamos mancharnos las manos, necesitamos color.
¿No crees que hay demasiados ‘’tontolistos’’ en esto del mundo del arte?
No especialmente en el mundo del arte, creo que estas personas están en cualquier ámbito.
Humildad o disciplina, ¿Qué es más necesario para una pintor?
Sin duda pienso que ambas son indispensables y necesarias para una artista. La humildad es un valor muy importante para mí. Soy una persona sencilla, modesta y que respeto a los que me rodean por igual, soy consciente de mis defectos y de mis virtudes. Esto unido a la disciplina, seria la base esencial de un artista.
¿Qué obra ha sido la que más trabajo te ha costado terminar? ¿Por qué?
Ha habido unas cuantas, pero sobre todo destaco y recuerdo los ojos de mi familia, en especial los de mi madre y mi padre que los realice para mi primera exposición individual “Miradas que hablan”. Sin embargo, con el que más me emocione y sentí, fue con los ojos de mi abuela. Quería que el espectador pudiera ver en sus ojos todo lo que había vivido, su personalidad, su luz, su calor, su valentía y a la vez su fragilidad. Tenía tantas cosas que mostrar que no sabía cómo llevarlo al lienzo. El proceso de iniciar el cuadro hasta terminarlo, en esa trayectoria, afloraron muchos sentimientos en mi, fue algo maravilloso porque por una parte quería terminar la obra pero por otro lado no. “Miradas que hablan” fue una exposición donde se podía ver los sentimientos, las vivencias y las emociones a través de los ojos que estaban plasmados en los lienzos.
Por último, ¿volverías a ser artista si volvieras a nacer?
Rotundamente sí, volvería a crear, a sentir, a experimentar y a amar a través del arte. No concibo mi día a día sin mancharme las manos, sin tocar, sin coger un pincel, sin tener la cabeza llena de ideas, imágenes, sentimientos, música y hasta pájaros……no concibo una vida sin color, sin romper, sin terminar y luego volver a retomar. Si volviera a nacer sería artista porque es lo que realmente me hace feliz.
