Quizás sea el momento equivocado,
ahora ya estamos en enero,
2022 quedó atrás,
solo queda anhelo.
Vuelve a empezar el juego.
De este año todavía no tengo el trailer,
a cambio,
puedo ofrecer tres palabras a modo de spoiler,
emocional, intenso y pasajero.
2022 , no estoy orgullosa de haberte conocido,
me has llenado de heridas,muchos dirán que es ley de vida.
Gracias a tus caídas me he vuelto mi propia heroína,
con tus soplidos provocaste un torbellino,
ahora tienes una estrella más en el cielo.
Durante muchos meses fui náufrago,
pasé por muchos barcos, de todos los rangos,
en algunos faltaba tanto espacio que dolía el roce,
en otros,
sobraba tanto que bailaba a oscuras con la soledad,
no había sol.
Pasé muchas horas con Morfeo,
preferí desaparecer de donde era trofeo,
me cansé de coger polvo en las estanterías.
Ahora sé que amigos son 4, no 15.
Hace no mucho descubrí casa,
casa son aquellas personas que llenan,
sin pedir nada a cambio ,
irradian alegría ,
invitando a mejorar sin mediar palabra,
Aunque ahora algún cimiento tambalee.
Roma no se construyó en un día.
Nadie quiere hacer daño,
pero,
todos lo hacen,
aprendí a diferenciar quien hace daño sin querer,
y quien lo hace sin quererme.
Las despedidas fueron duras,
no quería irme,
deseaba quedarme ,
la magia negra nos separó.
Mala elección.
Dejé atrás el miedo,
soy más de luchar por lo que quiero,
rendirme no entra en mis planes.
2023, no espero nada de ti,
sin embargo,
de mí lo espero todo.
