La noche del sábado 11 de mayo será recordada para siempre. Desde los asistentes al concierto de inauguración del ciclo sinfónico, pasando por los músicos sobre el escenario, hasta la última persona implicada en la Asociación Arte y Cultura – Cieza. Todos ellos se dejaron la piel para que, durante la hora y veinte minutos que duró el concierto, el público pudiera disfrutar de una interpretación de calidad y fuera consciente de lo que se puede conseguir si uno cree verdaderamente en algo.
El concierto fue presentado con unas breves palabras por la concejala de Cultura, María Turpín, que reflejaron bien el sentimiento de todos los que han formado parte de la organización de este proyecto. Lo que pasó la noche del sábado no es otra cosa que el trabajo incansable hacia la consecución de un sueño.
Tras esas breves pero emocionantes palabras, bajo la dirección de Francisco J. Ríos-López, dio comienzo el concierto. La primera parte fue un viaje a través de las oberturas de las óperas de La Flauta Mágica de Mozart, los esclavos felices de Arriaga, y la Cenerentola de Rossini. Todas ellas de buena complejidad técnica, fueron además ejecutadas con gran pasión.
Sin embargo, no sería esta primera parte más que un aperitivo para lo que estaba por venir. El concierto había sido denominado como ‘Pensar el destino’ por alguna razón, y la sinfonía del destino, la 5ª Sinfonía de Beethoven, inundó de música del más alto nivel todo el teatro durante una segunda parte apoteósica, que terminó con un extenso aplauso de todo el público.
Desde la Asociación y el proyecto de Cieza Filarmónica agradecen inmensamente toda la confianza puesta en ellos y esta iniciativa, que tanto trabajo y esfuerzo lleva detrás, principalmente a los patrocinadores, a la Concejalía de Cultura, y a todos los representantes del ayuntamiento que estuvieron presentes en el concierto. Por eso, retoman las palabras que ya utilizaron durante el X Aniversario: “Si ustedes quieren, si el público quiere, aquí hay música para rato”.