Así, verbalmente en el Pleno, indicó que se colocaría un cartel limitando el uso horario de la instalación deportiva del Jardín de Partido para preservar el descanso vecinal, alterado por el tremendo ruido que produce el golpeo de los balones contra la valla metálica del mismo. Y por escrito contestó que este mes la Consejería de Educación realizará la consolidación del muro sur del colegio Cristo del Consuelo “por lo que a principios del curso escolar la valla actual se habrá retirado”. Respecto del mal uso de algunos propietarios de perros que llevan sus mascotas a orinar y defecar en el césped de Marín-Barnuevo avanzó “señales disuasorias en septiembre”, señalando que los servicios municipales estudian actualmente la propuesta de CCCi de instalar un Pipí-Can en la esquina de la calle Tomás Valiente.

También le anunció el traslado a la Consejería de Obras (titular de la instalación) de la necesidad de mejorar las aceras en el Puente del Realejo. Menos satisfactorias fueron las respuestas relativas a la esquina de Buen Suceso con Mesones, resaltando que la valla metálica delimita los distintos usos que para la zona contempla el actual PGMO y que no veía necesidad alguna de diseñar aparcamientos mixtos de carga y descarga y libres, y sobre las obras necesarias en la avenida de Azorín indicó “actuaciones” durante este año, estudiando varias opciones y dependiendo de los recursos económicos. “Se podrá estar más o menos de acuerdo con este concejal del PP, nosotros lo estamos pocas veces, pero reconozco que es el más serio y trabajador de la bancada popular en el deber legal que tiene de contestar las preguntas de la oposición”, afirma el portavoz centrista.